FUTUROS EMPLEOS PARA NUESTROS HIJOS E HIJAS
Muchos programas de tv, estudios y autores, escriben en los últimos meses sobre el desempleo y el futuro de nuestros hijos e hijas, porque ya no están los tiempos como para decirle a tu hijo: " busca un buen trabajo que dure toda la vida" el cambio de actitud de los padres en estos tiempos es que desde las fábulas y los cuentos debemos explicarles a nuestros hijos e hijas con edades tempranas, que nada es para siempre y menos un trabajo, ya no un buen trabajo, porque lo ideal tampoco existe, ni siquiera en el autoempleo.
Hacia 4º de la ESO o finales del Bachillerato, podemos buscar las empresas familiares propias o de amigos donde darles la primera experiencia Laboral, más para aprender que para generar ingresos.
Nos preguntamos muchas veces: ¿un oficio o una carrera? porque no las dos, hoy por hoy muchos de los altos ejecutivos que antes ganaban 90.000 € al año, se quedan en desempleo y se tienen que conformar con 35.000€ o reinventarse; otros profesionales medios (sin doctorados o máster) que aprendieron un oficio paralelo a su carrera (nuevas tecnologías, guitarra, cerámica, etc...) hoy han encontrado una salida a corto plazo como profesores, teletrabajos etc...
Ya en una primera experiencia, ayúdele a su hijo e hija a resolver los problemas que pueda tener y confiérales la importancia necesaria, porque aunque ya hemos pasado por ello y lo resolvimos, los chicos y chicas nunca podrán dilucidar el futuro. Ellos lo ven desde su sentir y esa es la magnitud conferida al problema.
Otro detalle que considero importante y sobre el cual podemos reflexionar es a la hora de asesorarles en su futuro y que está marcando la nueva tendencia es que nuestros hijos e hijas estudien realmente su vocación y no la profesión de nosotros, ya sea porque creamos que le dejamos un legado o unos buenos contactos.
Las profesiones de economistas y abogados, son un ejemplo común; treintañeros o cuarentones, al hablar con amigos resaltan con emoción y pasión sus aptitudes en actividades que difieren de sus carreras en sus CV, en la parte final lo manifiestan como aficiones (teatro, cómics, relaciones personales, comercio, moda los perros, la escritura etc... ), y si de haberse dedicado a ello, ¿ hoy fuesen los mejores en su campo?
Y es que aunque nada es para siempre pero después de vivir lo vivido... ¿ quién nos quita lo bailao?
Muchos programas de tv, estudios y autores, escriben en los últimos meses sobre el desempleo y el futuro de nuestros hijos e hijas, porque ya no están los tiempos como para decirle a tu hijo: " busca un buen trabajo que dure toda la vida" el cambio de actitud de los padres en estos tiempos es que desde las fábulas y los cuentos debemos explicarles a nuestros hijos e hijas con edades tempranas, que nada es para siempre y menos un trabajo, ya no un buen trabajo, porque lo ideal tampoco existe, ni siquiera en el autoempleo.
Hacia 4º de la ESO o finales del Bachillerato, podemos buscar las empresas familiares propias o de amigos donde darles la primera experiencia Laboral, más para aprender que para generar ingresos.
Nos preguntamos muchas veces: ¿un oficio o una carrera? porque no las dos, hoy por hoy muchos de los altos ejecutivos que antes ganaban 90.000 € al año, se quedan en desempleo y se tienen que conformar con 35.000€ o reinventarse; otros profesionales medios (sin doctorados o máster) que aprendieron un oficio paralelo a su carrera (nuevas tecnologías, guitarra, cerámica, etc...) hoy han encontrado una salida a corto plazo como profesores, teletrabajos etc...
Ya en una primera experiencia, ayúdele a su hijo e hija a resolver los problemas que pueda tener y confiérales la importancia necesaria, porque aunque ya hemos pasado por ello y lo resolvimos, los chicos y chicas nunca podrán dilucidar el futuro. Ellos lo ven desde su sentir y esa es la magnitud conferida al problema.
Otro detalle que considero importante y sobre el cual podemos reflexionar es a la hora de asesorarles en su futuro y que está marcando la nueva tendencia es que nuestros hijos e hijas estudien realmente su vocación y no la profesión de nosotros, ya sea porque creamos que le dejamos un legado o unos buenos contactos.
Las profesiones de economistas y abogados, son un ejemplo común; treintañeros o cuarentones, al hablar con amigos resaltan con emoción y pasión sus aptitudes en actividades que difieren de sus carreras en sus CV, en la parte final lo manifiestan como aficiones (teatro, cómics, relaciones personales, comercio, moda los perros, la escritura etc... ), y si de haberse dedicado a ello, ¿ hoy fuesen los mejores en su campo?
Y es que aunque nada es para siempre pero después de vivir lo vivido... ¿ quién nos quita lo bailao?
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Adri